¿Por qué los niños necesitan una ecografía abdominal?

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¿Por qué los niños necesitan una ecografía abdominal?
¿Por qué los niños necesitan una ecografía abdominal?
Anonim

No se asuste si el pediatra local se ofrece a llevar a su hijo a una ecografía abdominal. No rechace este estudio, no afecta el funcionamiento del cuerpo del bebé de ninguna manera, no le causa dolor y no lo irradia.

¿Cuándo está indicada una ecografía?

Ultrasonido abdominal para niños
Ultrasonido abdominal para niños

La ecografía de la cavidad abdominal para niños menores de un año se realiza en los siguientes casos:

- para evaluar el desarrollo de los órganos internos y confirmar la ausencia/presencia de anomalías;

- con ictericia en recién nacidos;

- con regurgitaciones frecuentes. Al mismo tiempo, también es necesario verificar si hay signos de una patología del desarrollo cerebral;

- con poco aumento de peso;

- con deposiciones líquidas frecuentes, sin signos de infección concomitante;

- si sospecha piloroespasmo o estenosis pilórica, cuyos síntomas son idénticos.

Ultrasonido de la cavidad abdominal a precio de niño
Ultrasonido de la cavidad abdominal a precio de niño

Pero esta no es una lista completa de las indicaciones para las cuales se prescriben ultrasonidos abdominales en niños. Entonces, para los bebés adultos, dicho estudio es necesario cuando:

- dolor abdominal;

- sensación de pesadez y tensión en el lado derechohipocondrio;

- amargura en la boca, eructos agrios, mal aliento;

- ictericia;

- flatulencia.

Además, cualquier lesión en la región abdominal es indicación directa de una ecografía si va acompañada de dolor, y debe realizarse lo antes posible.

Preparación para el procedimiento

Una ecografía abdominal para niños no provoca dolor ni malestar intenso, no da miedo. Pero es necesario prepararse adecuadamente y no alimentar al niño antes del procedimiento:

- para los recién nacidos, el período de ayuno es de unas 3 horas;

- para bebés menores de 3 años - 4 horas;

- Los niños mayores de 3 años no deben comer durante al menos 6 horas.

Durante la lactancia, la madre debe abandonar los alimentos que provocan la formación de gases en los intestinos (legumbres, frutas y verduras crudas, pan integral, kvas, varios dulces, jugos, pasteles, leche, etc. por recomendación de un médico). Los niños menores de 3 años no deben comer purés de verduras y frutas ni beber jugos el día del estudio. Pero antes de una ecografía de la cavidad abdominal, los niños mayores de 3 años requieren una preparación más completa. Deben someterse a una dieta de tres días que excluya los alimentos que producen gases. El día del estudio, solo puede beber agua corriente.

Cómo y dónde se hace una ecografía

Si el pediatra del distrito te manda a hacerte una ecografía, lo más probable es que te la hagan de forma gratuita en la clínica. Pero si el hospital de niños no tiene equipo, especialistas o si desea verificar los resultados, puede averiguar dónde más puede hacer una ecografía abdominal para un niño. El precio de un estudio de este tipo es prácticamente el mismo que el de un procedimiento similar para adultos, en la mayoría de los casos depende de la clínica que hayas elegido. Pero tenga en cuenta que solo los especialistas en niños deben mirar a los bebés. Un médico especialista en adultos no podrá evaluar adecuadamente los resultados del diagnóstico realizado al bebé.

Ultrasonido de la cavidad abdominal del niño descifrando
Ultrasonido de la cavidad abdominal del niño descifrando

Como resultado del estudio, se pueden identificar una serie de problemas, tales como:

- hepatitis (las formas aguda y crónica son visibles);

- cálculos y coágulos en la vesícula biliar;

- quistes y neoplasias en el hígado, congestión en el mismo;

- patología del bazo (agrandamiento, aparición de lóbulos adicionales) o su lesión, ataque al corazón;

- peritonitis;

- signos de pancreatitis;

- ganglios linfáticos inflamados.

Nunca subestime la necesidad de una ecografía del abdomen del niño. La transcripción de los resultados obtenidos debe ser comunicada a los padres y trasladada al pediatra. El diagnóstico definitivo ya lo establece el pediatra, pudiendo prescribir estudios complementarios, recomendar tratamiento o consultas con otros especialistas especializados.

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